¿ERES UNA AMAZONA DEL S.XXI?
Y de serlo ¿Para que me serviría, que ganaría y perdería en ello, porque debería interesarme?
A ti no lo se, pero yo ganaría más que perdería porque ya lo he comprobado en mi piel.
Por primera vez en toda mi vida; vivo como deseo y no como otros preferirían; hago lo que quiero y no lo que otros querrían; me respeto profundamente porque soy coherente entre lo que pienso, siento y hago; y porque amo con pasión y compasión mis sombras más oscuras y mis defectos.
10 RAZONES POR LAS CUALES UNA MUJER NO ES UNA AMAZONA:
1- La mujer que no se cuestiona sus principios y creencias cada cierto tiempo,que no es flexible ni tolerante con actitudes e ideas de otras personas a las que ella juzga, porque hacen tambalear sus valores que ya no se aguantan por ningún lado. Una mujer que cree que solo existe su verdad.
2- La mujer que confunde el respeto y la generosidad con el sacrificio; la mujer que es excesivamente generosa con los demás porque con esa actitud, cree callar su conciencia que le dice que el verdadero motivo por el que se vuelca tanto en los demás, es para conseguir atención, reconocimiento u otro tipo de intereses.
3- La mujer que intenta ser "perfecta"; estar sexy pero no demasiado para dar una imagen competente y profesional. Trabajar más de lo que le exigen descuidando así su salud física y emocional, e incluso a veces la debida atención y cuidado de sus seres queridos. Y todo esto porque ha de mantener un estilo de vida del que ya es una esclava.
4- La mujer que trata a su pareja o marido como si fuera menor de edad; le permite ciertas concesiones cuando a ella le interesa para reprenderle después si no recibe la atención que desea o no consigue lo que esperaba.
Mientras ella gruñe quejándose de la "inutilidad de él" para las tareas hogareñas. El piensa extrañado: entonces ¿Porque siempre acaba haciéndolas ella? Y la mujer piensa: sin mi él no podría vivir.
5- La mujer que sigue preparando la merienda a sus hijos cuando éstos ya tienen edad para hacérsela solos, les organiza las bolsas de gimnasia del cole y hace los deberes con ellos. Mientras se comunica con sus hijos con diminutivos (pues por alguna extraña razón cree que aún tienen tres años), elevando el tono de su voz a un matiz tan agudo que se hace del todo insoportable para tímpanos no habituados.
6- La mujer que discrimina sin tomar conciencia de ello, a otras féminas por su distinta condición civil.
Esta mujer se siente cómoda relacionándose con otras mujeres casadas o en pareja como ella, sin embargo difícilmente dejará que una separada, divorciada o soltera llegue a formar parte de su exclusivo grupo de Heras. ( Hera, es el arquetipo de "esposa" fiel pero posesiva de "su hombre").
7- La mujer que pone en manos de su pareja o marido las cosas más importantes y trascendentales de su vida como pueden ser: la vivienda, manutención y educación de sus hijos, la suya propia, el nivel de confort, calidad y estilo de vida y su autoestima.
Sin antes haberse preguntado, si no sería mejor para ella y los suyos, llevar una vida lo más coherente posible con sus propias capacidades económicas, personales y emocionales. Así si algún día el "soporte" se acaba, ella no se quedará sin apenas nada ni se vendrá abajo.
8- La mujer que se esconde tras una profesión, vocación, estudio o investigación muy absorbente haciendo de ello casi su único "Leiv motiv", olvidándose de mantener vivas sus relaciones de amistad con otras mujeres así como sus relaciones sentimentales y afectivas por miedo a sentir dolor o frustración en ellas. Una amazona no teme amar pero a amar bien.
9- Una mujer que se refugia en una relación sentimental tóxica y destructiva por miedo a: ser ella misma, dar sus razones sin que por ello deban coincidir o no con las de su pareja, vestir como ella desee, relacionarse con quién quiera, estar sola, no ser bien vista, perder su "estatus", no tener las mismas posibilidades económicas o sociales que ahora si tiene......
10- Una mujer insegura, con complejo de inferioridad, soberbia y con ninguna estima hacia ella misma. Una mujer que no desea conocerse ni entenderse porque no quiere enterarse de sus miserias, y por tanto se entromete en la vida de los demás apoderándose de ella como si fuera suya propia. Acaba liderando a un grupo de mujeres a las que primero atrae con falsa simpatía y adulación para luego sembrar en ellas (ya de por si inseguras) el germen de la envidia y la critica. Esta situación seguirá así hasta que el malestar e incomodidad de algunas se vuelva sensación de puro acoso, obligando a todas a romper la relación.
